
Empieza cortando las pechugas de pollo por la mitad y rellenando cada una con 50 g de queso mozzarella rallado.
Una vez hechas, empaniza las pechugas de pollo, rebozándolas primero con huevo batido, luego con harina de trigo, nuevamente con huevo batido y finalmente con pan rallado.
Repite este proceso con todas las pechugas.
En una sartén agrega aceite hasta cubrir el fondo.
Fría los pollos en aceite caliente hasta que estén dorados y deja escurrir el exceso de aceite sobre toallas de papel.
En un refractario coloca la salsa de tomate, agrega las pechugas de pollo encima, agrega 2 cucharadas de salsa de tomate encima de cada pollo y unta.

Sebas hace 10 meses
Con que otro ingrediente puedo rellenar las pechugas de pollo?.
Aquella Receta hace 10 meses
Jamón, salami, pechuga de pavo

Sonia hace un año
Me gusta todas las recetas salada...